Sin
duda este año complicado de pandemia y modificaciones en el estilo de vida, y
además de estos nuevos factores, los amantes de los libros hemos compartido
otra constante este dos mil veinte: nuestro amor por los libros y la lectura
nos ha salvado.
A
título personal, tuve la fortuna, por que fue casi por casualidad que descubrí
el Maratón Guadalupe-Reinas el año pasado y conocí a las Beforas, recuerdo que
cuando escuché las consignas elaboré mentalmente mi TBR y dos días después fui
entendiendo cuál era exactamente la dinámica y cuál era el objetivo, así que
reorganicé; pero lo más emocionante sin duda fue ir conociendo a las Beforas, “interactuar”
con ellas a través de sus redes y además salir de mi zona de confort.
Al
mismo tiempo darme cuenta de lo poco visibilizada que tenía a muchas talentosas
escritoras de una enorme serie de géneros, cómo es que había transcurrido tanto
tiempo en mi vida de lector sin saber de ellas, solo limitada a las más famosas
y dejando fuera tanto talento. Como dije, salí de mi zona de confort, fue mi
primer maratón el cual pude concluir y me sentí muy orgullosa y contenta de mi
misma, era el cierre y comienzo de un ciclo perfecto.
Desde
luego no podía esperar a qué comenzaran las consignas de lecturas conjuntas (ya
para entonces había entendido la dinámica y propuesta de Librosb4tipos); y entonces
ávidamente comencé mi primera lectura con las Beforas, y no solo eso, gracias a
esta dinámica de acompañamiento en la lectura, ingresé a mi primer club de
lectura, y entonces descubrí dos nuevas experiencias: que la lectura no siempre
ha de hacerse en soledad, y que vale la pena descubrir nuevas lecturas que de
otra forma no me habría animado a hacerlo por mi cuenta.
Y
entonces llegó la pandemia, muchas cosas se detuvieron, pero no la lectura, no
las charlas e intercambios de las lecturas, aprendiendo tantas perspectivas y
opiniones, creciendo y amando lecturas, descubriendo a mujeres llenas de
talento, sin comprender otras pero feliz de haber experimentado, y formar parte
de las lecturas en voz alta en donde también sentí la proximidad de otros
lectores; y conforme transcurrían los meses, surgía la emoción ante la proximidad
del Guadalupe-Reinas ¿Qué traería este año? ¿cuáles serían las consignas? ¿cómo
sería este remanso para el alma después de tanto desgaste emocional y mental?
Y
entonces el tan anhelado doce de diciembre llegó, pero diez días antes, en
plena madrugada esperábamos a Librosb4tipos para conocer las consignas; casi me
explota la cabeza porque me hice el lío con muchas de ellas, como que de entrada
no entendí a qué se refería, gracias a Dios nos rescataron una vez más y
amablemente las Beforas empezaron a hacer sus recomendaciones y a explicar cada
consigna, además del video de aclaración de dudas; me sentí poderosa al poder
armar mi TBR para este dos mil veinte.
Y
aunque lenta voy porque comencé mi primer lectura exactamente el doce y la he
terminado hasta hoy dieciocho, el que me acompañara en mi primer lectura “El
color púrpura” precisamente cuando mi padre fue internado por COVID, me parece
que no ha sido casualidad, entre la entrega de trabajos finales de conclusión
de semestre, examen y el desgaste por lo de mi papá, mi primer lectura ha sido
un verdadero bálsamo emocional, el Guadalupe-Reinas dos mil veinte ha sido y es
un refugio para este desgaste emocional y mental, gracias a las beforas me he
sentido menos perdida, menos sola, más cobijada.
Hoy
no solamente he terminado mi primer lectura, también he concluido exámenes, y
en breves días me entregarán a mi papá, quien ha respondido muy bien al
tratamiento; así que aunque lenta, en estos días agárrense, porque voy
imparable y muy emocionada con todas mis lecturas, descubriendo nuevas
lecturas, nuevas mujeres (ya casi no puedo pensar en autoras que no lo sean)
nuevos géneros, cosas que sin las Beforas jamás me habría aventurado, y sin
duda este Maratón Guadalupe-Reinas 2020 representa hoy no solo un apapacho y
acompañamiento lector, sino una comunidad de sororidad y a quien me parece que
siempre puedo acudir, al que siempre puedo regresar.
Comentarios
Publicar un comentario